Ni el Met, ni los Oscars, el evento que reúne a todas las celebridades que importan es, el casamiento de Marc Jacobs.
Luego de protagonizar la propuesta de casamiento más divertida e inusual del 2018, el diseñador Marc Jacobs celebró su casamiento con el modelo Char Defrancesco en Nueva York con todas las figuras referentes del mundo de la moda de testigos.
No hubo ramo de flores pero en su lugar hubo un bolso vintage de Chanel y como no podía ser de otra manera, la boda de Marc y Char fue un despliegue de diseños, tendencias y celebridades del cine, música y moda (obviamente). Kate Moss en compañía de su hija, las hermanas Hadid, Naomi Campbell, Kaia Gerber y la mismísima Anna Wintour fueron algunas de las asistentes al romántico evento qué compite dignamente con las red carpets y los front rows más importantes del mundo.
En cuánto a los recién casados, mientras el diseñador optó por un traje sobrio con el bolso chanel como complemento, Defrancesco se arriesgó con un saco verde de terciopelo y moño combinado y ambos lucieron pines de pingüino de diamante, en referencia que estos animales se escogen para toda la vida, regalo del director de diseño de Prada y Miu Miu, Fabio Zambernardi.
La recepción tuvo lugar en el restaurante Grill Room, donde una torta de 5 pisos, un show de baile y sudaderas estampadas con "Vine a la celebración de bodas de Marc y Char y todo lo que obtuve fue esta pésima sudadera" como regalo para los invitados, emocionaron y fascinaron a todos los que asistieron.
Que viva el amor!